Walter Dennis Muñoz
Elecciones presidenciales en Uruguay
No voy a entrar en el tema propio de los uruguayos que ha sido su gran nivel cívico en un acto tranquilo, transparente y de mesura en los ganadores y perdedores.
Me interesa proponer lecturas en el concepto democracia que hoy en día navega en aguas turbias e indefinidas. Se trata de la especificidad y diferencia que determina que cualquier noción nos guíe meridianamente para saber que decimos cuando pronunciamos una palabra. En política es más contundente aún, porque apunta a un funcionamiento fáctico de una sociedad en su totalidad. Democracia y pobreza no pueden conjugarse. Democracia y salud pública deficitaria es otro cuadrado redondo. Educación privada cualitativa y educación pública mediocre tampoco se conjuga. Vejez maltratada con jubilaciones de vergüenza y viviendas de mala calidad es inaceptable dentro de la idea de democracia. Reparto de la riqueza tan desigual es una ofensa a la cultura, a los valores centrales de la vida y al puro hecho de vivir.
Cuando estaba en la enseñanza secundaria había muchos juegos de ingenio de moda. Uno de ellos era ver la semejanza o diferencia entre objetos. A la pregunta en que se diferencia un elefante de un kilo de azúcar, por la enorme diferencia quedábamos mudos. No sabíamos decir claramente la diferencia. La respuesta era contundente: Bueno si no sabes la diferencia ten cuidado entonces cuando vayas a comprar un kilo de azúcar no te vayan a dar un elefante.
Hoy EE.UU. valida el cuadrado redondo y confunde un elefante con un kilo de azúcar, pero no lo confunde conceptualmente, lo hace estratégicamente. Hubo elecciones, alguien ganó lo demás no tiene importancia.
En la cumbre iberoamericana en Portugal cuyo cierre no lo presentó ningún canal uruguayo de los que hay en Telecable pero si lo hizo el canal 24 horas de España, terminó sin una declaración contundente contra este atentado a la democracia. Si un estudiante en una entrevista consultado por un periodista sobre la guerra fría contestó que esta fue una guerra que se hizo en el polo, nada puede sorprender que los líderes de Latinoamérica hayan preferido soslayar el tema pero sí algunos países previsibles hayan avalado este show y caricatura de democracia. Si un estudiante le pregunta a su profesor que le defina democracia, contestará este, consulte en la embajada norteamericana?
Cantando bajo la lluvia en Montevideo y en varios departamentos de Uruguay se festejó el triunfo de José Pepe Mujica como el Presidente electo en Uruguay. Fue el que dijo que hay que caminar en dirección al corazón del pueblo, lo demás es filosofía de boliche. Que hay que incorporar a Uruguay en la ciencia y la tecnología, que hay trabajar por construir un país solidario y justo para nuestros hijos y nietos, que hay que dialogar, crear consensos básicos con todo el espectro político, en su estilo abierto, franco, sin artilugios, sin esa retórica añeja y anácronica a lo Sanguinetti. El mantuvo el relato, el discurso, el mensaje del frente amplio para que la gente a pesar de la lluvia, a pesar que falta mucho por hacer, quisiera cantar bajo la lluvia, es posible una democracia participativa, clara, precisa que no pueda ser confundida con ningún mamarracho forzado desde afuera.
Walter Dennis Muñoz
Periodista
Elecciones presidenciales en Uruguay
No voy a entrar en el tema propio de los uruguayos que ha sido su gran nivel cívico en un acto tranquilo, transparente y de mesura en los ganadores y perdedores.
Me interesa proponer lecturas en el concepto democracia que hoy en día navega en aguas turbias e indefinidas. Se trata de la especificidad y diferencia que determina que cualquier noción nos guíe meridianamente para saber que decimos cuando pronunciamos una palabra. En política es más contundente aún, porque apunta a un funcionamiento fáctico de una sociedad en su totalidad. Democracia y pobreza no pueden conjugarse. Democracia y salud pública deficitaria es otro cuadrado redondo. Educación privada cualitativa y educación pública mediocre tampoco se conjuga. Vejez maltratada con jubilaciones de vergüenza y viviendas de mala calidad es inaceptable dentro de la idea de democracia. Reparto de la riqueza tan desigual es una ofensa a la cultura, a los valores centrales de la vida y al puro hecho de vivir.
Cuando estaba en la enseñanza secundaria había muchos juegos de ingenio de moda. Uno de ellos era ver la semejanza o diferencia entre objetos. A la pregunta en que se diferencia un elefante de un kilo de azúcar, por la enorme diferencia quedábamos mudos. No sabíamos decir claramente la diferencia. La respuesta era contundente: Bueno si no sabes la diferencia ten cuidado entonces cuando vayas a comprar un kilo de azúcar no te vayan a dar un elefante.
Hoy EE.UU. valida el cuadrado redondo y confunde un elefante con un kilo de azúcar, pero no lo confunde conceptualmente, lo hace estratégicamente. Hubo elecciones, alguien ganó lo demás no tiene importancia.
En la cumbre iberoamericana en Portugal cuyo cierre no lo presentó ningún canal uruguayo de los que hay en Telecable pero si lo hizo el canal 24 horas de España, terminó sin una declaración contundente contra este atentado a la democracia. Si un estudiante en una entrevista consultado por un periodista sobre la guerra fría contestó que esta fue una guerra que se hizo en el polo, nada puede sorprender que los líderes de Latinoamérica hayan preferido soslayar el tema pero sí algunos países previsibles hayan avalado este show y caricatura de democracia. Si un estudiante le pregunta a su profesor que le defina democracia, contestará este, consulte en la embajada norteamericana?
Cantando bajo la lluvia en Montevideo y en varios departamentos de Uruguay se festejó el triunfo de José Pepe Mujica como el Presidente electo en Uruguay. Fue el que dijo que hay que caminar en dirección al corazón del pueblo, lo demás es filosofía de boliche. Que hay que incorporar a Uruguay en la ciencia y la tecnología, que hay trabajar por construir un país solidario y justo para nuestros hijos y nietos, que hay que dialogar, crear consensos básicos con todo el espectro político, en su estilo abierto, franco, sin artilugios, sin esa retórica añeja y anácronica a lo Sanguinetti. El mantuvo el relato, el discurso, el mensaje del frente amplio para que la gente a pesar de la lluvia, a pesar que falta mucho por hacer, quisiera cantar bajo la lluvia, es posible una democracia participativa, clara, precisa que no pueda ser confundida con ningún mamarracho forzado desde afuera.
Walter Dennis Muñoz
Periodista